Travessera del Coto. Me encuentro sentado en medio de la carretera, no dentro de Algemesí, mi pueblo, si no en las afueras entre los campos que delimitan el barrio del Pla. Las parcelas que me rodean aquí son, a mi derecha plantaciones de naranja y de caquis y a mi izquierda unos pocos chalets rodeados de campos abandonados, que se llenan los domingos de cuadrillas y familias haciendo su paella. Al otro lado se puede ver, a lo lejos, las casas del Pla, cada una como ninguna, con su estilo propio. La carretera está prácticamente vacía, podrías soltar a tu perro sin preocuparte de que le pase nada, sólo la transcurre alguna persona solitaria encasquetada con sus auriculares. Hay quien viene solo o acompañado a desconectar de sus responsabilidades o quien, al igual que yo, ha salido con su perro a pasear tranquilo, viendo las nubes pasar, sin necesidad de volver a casa pronto.
¿Por qué he elegido este lugar?
He elegido este sitio porque es donde voy cuando me siento saturado, cuando mis responsabilidades me agobian y quiero relajarme fuera de casa. O simplemente voy a estar, porque me apetece. También voy mucho con mi perro, es perfecto para que vaya suelto, solo, explorando los campos oliendo los distintos aromas del campo. Este sitio me relaja, a parte de porque pasa muy poca gente, por las vistas, el contraste de los campos con las casas de mi barrio, la montaña de la Murta a lo lejos increíblemente verde, el cielo y el silencio.
¿Qué te hace sentir agusto?
Yo soy una persona que siempre ha preferido el campo, las montañas, los pueblos… antes que la ciudad y sus ruidos. Así pues, siempre que me estreso busco refugio en sitios abiertos, que no me hagan sentirme encerrado, tranquilos.
¿Existe algún elemento molesto?
Si siempre acudo allí cuando lo necesito no es por nada, no recuerdo haberme quejado de algo de esta carretera en todas las veces que he ido. Por decir algo, las tardes puntuales de domingos que se llenan de gente paseando y deshacen la tranquilidad.
¿Crees que te sentirías igual en otro espacio ahora mismo?
Evidentemente igual no, pero no sería difícil encontrar otro espacio que cubra la función que tiene este sitio para mi, a cada viaje que hago encuentro una calle, una plaza, una senda que me tranquilizan como lo hace esta carretera. Incluso salir con la bici me relaja de la misma forma cuando me fijo más en el paisaje que voy recorriendo que en el ritmo que llevo.
¿Piensas que las condiciones de este sitio influyen sobre sus ocupantes?
Yo creo que nadie debe sentir este sitio como yo lo siento, para la gente es un sitio pasajero, pasan por esta carretera porque figura en su caminata planeada y ya, sin más, unos campos más por los que han pasado. En cambio yo voy a esa carretera para quedarme un buen rato y luego volver a casa, es decir, para mi es el destino de mi ruta.
¿Cambiarías alguna cosa?
Pienso que con dos o tres bancos a lo largo de la carretera donde sentarse a disfrutar las vistas y relajarse, dos basuras para que la gente no tire las cosas a la acequia ensuciándolas y una fuente donde pueda repostar el agua harían de este sitio un lugar donde vale la pena hacer una pausa en la caminata para disfrutar de las vistas y descansar.